La comunicación intimista, no solo mejora la empatía entre las personas, sino que pone en marcha mecanismos invisibles (moléculas de la emoción, bio-electricidad etc) para que aparezcan PROPIEDADES EMERGENTES, propias de un SISTEMA COMPLEJO. Este es el nombre oficial para denominar las relaciones interpersonales. Una de las propiedades emergentes subsidiarias es la mejora de la Coherencia Cardiaca, medible por ordenador. Es la ratificación de lo expuesto por Servan Schreiber en su libro Curación emocional.